Comer pipas es un hábito muy común, especialmente si es de forma compulsiva cada día. Pero, ¿alguna vez te has preguntado si este acto podría dañar tus dientes?

 

Las pipas y los dientes 

Las pipas de girasol o de calabaza son aperitivos muy populares en España, pero el hecho de masticar y abrir sus duras cáscaras con los dientes puede causar daños. Estos snacks requieren que usemos los dientes de una manera no natural y esto puede llevar a desgastes, fracturas y otros problemas dentales.

 

El Consejo General de Dentistas de España señala que el uso incorrecto de los dientes, como abrir o masticar objetos duros, representa entre el 1 y el 3% de las urgencias dentales.

 

¿Qué daños pueden causar a los dientes? 

Las pipas pueden dañar el esmalte dental, la capa dura y protectora de nuestros dientes. Al romper la cáscara de la pipa con los dientes, estamos sometiéndolos a una presión que puede causar fisuras o astillas en el esmalte. Con el tiempo, esto puede llevar a problemas más serios como la sensibilidad dental, caries y enfermedades periodontales.

 

Además, el hábito constante de comer pipas puede resultar en un desgaste desigual de los dientes, afectando la mordida y potencialmente causando problemas de mandíbula.

 

Recomendaciones para comer pipas 

No es necesario renunciar a las pipas por completo para proteger la salud dental, pero sí es importante tener precaución. Se recomienda abrir las pipas con las manos en lugar de los dientes para evitar daños.

 

Además, no olvides mantener una buena higiene bucal cepillándote los dientes y usando hilo dental regularmente, y realizar visitas al dentista al menos dos veces al año.

 

Si has notado algún cambio o daño en tus dientes por comer pipas, te recomendamos visitar nuestra clínica dental lo antes posible. Nuestros profesionales están aquí para ayudarte a mantener tu sonrisa saludable y proteger tus dientes. ¡Recuerda, prevenir es siempre la mejor solución!